lunes, 29 de julio de 2019

Dale, contale todo.

Dale, contale de nosotros, sin miedo.
Hablale.
Contale de nuestras noches de verano con la ventana abierta  y la música fuerte.
Contale de las interminables charlas, hablando de todo pero al mismo tiempo de nada.
Decile de esas mañanas de sol
camisa
vestidos
caminando hasta la parada.
Contale que lo que pasó esos días ya no existe.
Decile que si, nos divertimos pero que al final todo terminó.

Contale que por alguna loca razón nos volvimos a cruzar,
contale de la vez que te dije bien bajito y aguantando las lágrimas que eras un CAGÓN.

Dale, contale que lo que pasó entre nosotros no era nada,
contale que la querés a ella. Pero no se lo digas bajito, no seas cagón.
De nuevo.

Dale animate, decile que solo tenes ojos para ella, que ya ni hablamos porque sentías que le estabas fallando y que sobre todas las cosas te fallabas a vos.
Dale, no tengas miedo.

Contale que estoy bien, que sigo leyendo
y como ven, sigo escribiendo.
Contale que estoy planeando un viaje, que estoy buscando otras cosas...
Pero que esas "otras cosas" no te incluye a vos.
Contale que sigo loca, impulsiva y que sigo usando vestido, como siempre.
Contale que siempre te voy a querer, pero no de la forma que ella piensa.
Contale que nos deseamos lo mejor, dale, animate.

Contale que fuimos pero que no volveremos a ser.
Nada.
De nuevo.

Dale, contale de los ciclos sin fin, contale de las risas
contale todo. Sin miedo.

Dale, contale.
No seas cagón. Otra vez.
Contale de las veces que me hablaste de ella, de lo feliz que te hace,
contale de la vez que me dijiste que todo lo que querías era recostarte sobre sus piernas.
Dale contale.

Contale que no querés tener más miedo. Contale que ya no sos un cagón.

Dale. Contale todo.


Ya ni me acuerdo como se hacía esto